(Argentina, 2002, Digital HD, 75’, ATP)
Dirección: Andrés Di Tella
Ensayo autobiográfico sobre la televisión y la memoria. Un ida y vuelta entre la historia y la autobiografía: desde un primer recuerdo personal de la TV hasta los primeros recuerdos del medio en la Argentina. En el camino, la historia familiar y la de la propia Argentina.
“El tiempo verbal de los buenos documentales, como el de los buenos ensayos, es el condicional, un tiempo lábil atravesado por haces de otros tiempos que permite volver al pasado sin ocultar los devaneos del presente, corregir el rumbo a medida que se avanza y abrirse al encuentro de lo inesperado. Conjugado en primera persona, es el tiempo vacilante del pensamiento en marcha. La televisión y yo de Andrés Di Tella es, en ese sentido, ejemplar. Alternando el plural y el singular, la recta inicial y el zigzag de los desvíos, el apunte documental va virando sutilmente al ensayo autobiográfico. Siete años de televisión perdidos durante la infancia disparan una investigación que va desviando el foco desde el nacimiento de la televisión argentina (el etéreo reinado de Jaime Yankelevich, la máquina publicitaria de Perón y Evita) hacia una historia más íntima pero no menos sugerente en el recuento de un proyecto de país que se perdió: el imperio industrial Di Tella, el espinoso ajuste de cuentas con la herencia familiar. Si el documental se debate desde siempre entre los rigores de la pedagogía y la libertad de la invención, entre el deseo de verdad del testimonio y las licencias más caprichosas de la ficción, entre el documento público y el ensayo personal, Di Tella se deja llevar por las tensiones contradictorias del género y las domina con equilibrio perfecto; alterna la elocuencia muda del montaje y el relato autobiográfico, el hallazgo de archivo y la confesión inesperada, la trama de la historia pública y el diálogo familiar. ‘Lo que se perdió se perdió’, dice hacia el final de la película, pero el cine lo desmiente. La televisión y yo, fiel a la promesa del título, salda la deuda privada con la restitución estética de un capítulo de la historia colectiva”. Graciela Speranza
Lunes 2/12, 15:30 hs.