J’accuse – El affair Dreyfus
(J’accuse, Francia, 2019, DCP, 126’, AM13)
Dirección: Roman Polanski. Con Louis Garrel, Christophe Maratier.
En 1894, el capitán francés Alfred Dreyfus, un joven oficial judío, es acusado de traición por espiar para Alemania y condenado a cadena perpetua en la Isla del Diablo, en la Guayana Francesa. Entre los testigos que hicieron posible esta humillación se encuentra el coronel Georges Picquart, encargado de liderar la unidad de contrainteligencia que descubrió al espía. Pero cuando Picquart se entera de que se siguen pasando secretos militares a los alemanes, se adentrará en un peligroso laberinto de mentiras y corrupción, poniendo en peligro su honor y su vida.
2019: Festival de Venecia: Gran Premio del Jurado y Premio FIPRESCI
2019: 3 Premios César: Mejor director, guion adaptado y vestuario. 12 nominaciones
2019: Premios del Cine Europeo: Nominada a mejor film, director, guion y actor
2019: Premios David di Donatello: Nominada a mejor film extranjero
2020: Premios Goya: Nominada a mejor película europea
Hay dos directores de renombre y trayectoria sobre los que se ha vuelto particularmente problemático escribir desde la irrupción del movimiento #MeToo. Uno es Woody Allen, sobre quien pesan varias denuncias de su hija por abuso sexual y ahora es casi un paria para sus otrora fanáticos (basta con leer los comentarios en aquellas notas que reseñaron su autobiografía). El otro es Roman Polanski, condenado por una violación a una menor en 1977 y desde entonces exiliado fuera de Estados Unidos. Un delito que, sin embargo, no impidió que se alzara con una Palma de Oro y hasta con un Oscar a Mejor Director por El pianista, hace menos de veinte años.
Boicoteada en su estreno en Francia y reconocida –no sin polémica- con el Gran Premio del Jurado en el último Festival de Venecia, J’accuse debe su nombre a una famosa carta abierta escrita por el intelectual Émile Zola publicada en el periódico L’Aurore en 1898. Texto modélico de la argumentación escrita, allí denunciaba lo ocurrido con el capitán Alfred Dreyfus, un militar de origen judío acusado de espionaje y condenado a prisión en una remota isla de la Guyana Francesa. Fue un hecho que conmocionó a la opinión pública de entonces pero que, con el correr de los años, cuando se comprobó que Dreyfus era inocente y todo se había tratado de una maniobra jurídico-política con una fuerte impronta antisemita, adquirió una significación opuesta.
Que la última película de Polanski aborde uno de los hechos de manipulación más bochornos de la historia moderna de Francia, uno de los puntos más bajos de la Justicia gala, no hace más que habilitar un potencial paralelismo entre sus circunstancias personales y la del relato. Es, pues, un nuevo capítulo en la eterna discusión sobre si es posible separar la obra del artista. ¿Acaso Polanski encuentra en Dreyfus un alter ego histórico? ¿Es el director víctima de una persecución? La película, ambigua, atrapante, tensa e incómoda, no otorga respuestas definitivas.
Ezequiel Boetti – Otros Cines
Jueves 9/9, 18:00 hs.
Viernes 10/9, 15:30 y 20:30 hs.
Sábado 11/9, 18:00 hs.
Domingo 12/9, 15:30 y 20:30 hs.
Lunes 13/9, 18:00 hs.
Martes 14/9, 20:30 hs.
Miércoles 15/9, 18:00 hs.